domingo, noviembre 23, 2008

Autoayúdenme !


¡Autoayúdenme! :

En nuestra actualidad el género literario “Autoayuda” sorprende debido a su ascendente éxito comercial. En todas las bibliotecas y librerías uno puede encontrar un gran espacio dedicado pura y exclusivamente a este género.
Autores como Deepak Chopra, Jorge Buccay, Walter Riso -en sus respectivas áreas- acercan de forma rápida y efectiva soluciones para problemas que son comunes a la mayoría de los hombres y mujeres.

¿A qué se debe este imparable éxito de best-sellers?

Para responder esto vamos a tener que volver hacia atrás en la historia de la humanidad.

¿De qué manera se viajaba hacia el interior del alma y del autoconocimiento en épocas ancestrales? ¿Cuáles eran los métodos utilizados?

Desde épocas milenarias, aproximadamente en el siglo VIII a.C ya circulaban entre los hombres de Medio Oriente el conocimiento de las posiciones de meditación. Sentados en el piso, con la espalda, cuello y cabeza bien rectos, con las manos sobre los muslos o con las palmas juntas, eran algunas de las posturas necesarias para aclarar la mente y así llegar a una buena conexión con los dioses y con uno mismo. A la meditación le antecedía un profundo estado de concentración y finalizaba con la percepción supraconciente de los sentidos dirigidos hacia el propio interior.
Por otro lado la meditación era reforzada con “Mantras” (algunos de los cuales son utilizados hasta nuestros días). Estos consistían en palabras que se repetían en el momento de la meditación y que poseían cierto poder de concentración para entregarse a la observación del interior. El ritmo de las repeticiones debía ser constante y acorde con la respiración.
El hinduista Patañjali (S III a.C) decía: “Todas las experiencias psicológicas se originan en la ignorancia de la verdadera naturaleza humana y sólo cuando se elimina esa ignorancia el hombre descubre su verdadero ser: "el poder de la Conciencia pura reposando en su verdadera naturaleza". Este pasaje nos habla de la importancia que le daban estos hombres a la conexión con uno mismo, a lograr hallar el ser interior.
Otras figuras históricas de viajeros al interior del alma se encuentran en los misioneros que recorrían pueblos lejanos llevando un mensaje. Su particular estilo de vida les obligaba a moverse solo con lo necesario para subsistir. Debían enfrentar situaciones de riesgo y ser perseverantes porque se topaban con gente incrédula.
Por otro lado la imagen del místico tuvo gran peso en la literatura clásica; en el diccionario Grijalbo aparece esta definición: “Se dice de la persona que vive de la mística. Conjunto de doctrinas que sostienen la posibilidad de una experiencia espiritual, inmediata e inexpresable de continuidad o unión con la suprema divinidad."
Hinduistas, budistas, musulmanes, misioneros, místicos, consideraban que el camino hacia la autoconciencia y espiritualidad consistía en una práctica diaria y constante de ejercicios e invocaciones y largos caminos recorridos para lograr equilibrio y bienestar. ¡Nada más alejado que la propuesta de estos famosos libros de autoayuda!

Entonces, ¿Cuál es la clave de su éxito? ¿A qué se debe su imparable protagonismo?

Hay que notar la salvedad que los libros de autoayuda, a diferencia de los escritos de Medio Oriente, abarcan temáticas bien diversas y fraccionadas. En aquellos tiempos se creía que el éxito en cada área de la vida dependía del bienestar espiritual, hoy, esa realidad esta un poco trasgiversada. Los libros de Autoayuda van al grano, no se detienen en ejercicios ni procesos largos. Si uno tiene inquietudes y problemas en el ámbito laboral, tendrá un libro de autoayuda a su disposición, si lo mismo le sucede con su pareja y ésta no se decide a proponerle matrimonio vaya corriendo a su librería más cercana y pida: “Las reglas del juego” de Ellen Fein y Sherrie Schneider.
Este libro ofrece 35 reglas para conquistar al hombre ideal y conseguir que te propongan matrimonio.
Por ejemplo:
Regla 4: No quedes con él a mitad de camino ni pagues tu parte durante una cita.
Regla 5: No lo llames y devuelve sus llamadas muy de tarde en tarde.
Regla 7: No aceptes ninguna cita para el sábado a partir del miércoles.
Regla 12: Deja de salir con él si no te hace un regalo romántico para tu cumpleaños o para el día de los enamorados.
Regla 31: No comentes las reglas con tu terapeuta.
Regla 32: No infrinjas las reglas
Regla 33: Cumple las reglas y vivirás feliz.


¿Dónde quedaron los grupos de meditación y los maestros que debe indicar el sendero de la felicidad? ¿Acaso será Deepak Chopra el nuevo encargado de ofrecernos iluminación y manejo de las emociones?

En su libro “El libro de los secretos, Deepak Chopra da un útil consejo para controlar un sentimiento desagradable que pueda surgir en alguna ocasión…

“Ejercicio:
Otro catalizador para llegar a las energías de la sombra es la escritura automática: toma un ahoja de papel y empieza escribiendo la oración: “Me estoy sintiendo muy _______ ahora”. Llena el espacio en blanco con cualquier sentimiento que surja- de preferencia uno negativo que hayas guardado ese día-, y sigue escribiendo. No te detengas, escribe lo más rápido que puedas y anota cualquier palabra que quiera fluir.
Otras oraciones para iniciar este ejercicio:
“Lo que debí decir fue _______.”
“No puedo esperar decirle a alguien que yo ______.”
“Nadie puede impedirme decir la verdad acerca de _______”.
“Nadie quiere escuchar decir esto, pero ______.”

Mediante estos catalizadores, te estás dando permiso de expresarte, pero lo más importante es tener un sentimiento prohibido. Por eso las palabras no importan. Una vez que accedas al sentimiento podrá empezar el trabajo real de liberación.”


Planteado el paralelismo entre épocas milenarias y la nuestra, concluyo que cada cosa en su lugar, cada cosa a su tiempo… Si antes daban resultados y tenían éxito las prácticas difundidas por los budistas, hinduistas, metodistas, etc., era porque el contexto lo permitía. Hoy los libros de autoayuda son un claro reflejo del vertiginoso ritmo de la cotidianeidad.
Queremos todo ahora, ya, rápido, de la manera más sencilla posible. Estos libros dicen ser la clave del éxito y ¡este nos aguarda al finalizar la última página! No hay tiempo para detenerse en pequeñeces, en largas sesiones de meditación, en largos ayunos, en largas terapias. ¿Para qué esta pérdida de tiempo si podemos ir leyendo a Jorge Bucay en el subte camino al trabajo? Claro, pero observemos el ritmo de vida actual: trabajo, estudio, hijos, familia, amigos, cuentas a pagar, Internet, más trabajo, mejores autos, una casa más grande, vacaciones lujosas… Nada de esto deja tiempo para un buen trabajo introspectivo. Las prioridades son otras.
Andamos a las corridas, la competencia es imparable. Siempre queremos más y mejores cosas, siempre queremos ser los mejores. ¿Los mejores? Si, los mejores, omnipotentes, individualistas. ¡Yo puedo, yo puedo, yo puedo!
El prefijo auto (de auto/ayuda) conquista el deseo del hombre moderno. Reactiva su ego y le dice: vos podes solo, no necesitas de nadie más. Ni grupos de oración, ni Iglesias, ni templos. Vos solo. Vos podes resolver tu matrimonio, vos solo podes aprender de finanzas y ser exitoso, vos solo podes armarte una dieta, vos solo podes lograr tu bienestar.

¿Pero entonces, no sirven los libros de autoayuda?

Depende de que se esté buscando. Claro que hay libros que tienen tips interesantes y hacen llegar cuestiones complejas a toda la gente utilizando un vocabulario simple. Pero de todas formas se incurre en el facilismo, en el consumismo. En la desaparición del individuo y la tendencia a la homogeneidad. Ahora la moda es comprar libros de autoayuda y todo el mundo va y los compra y se convence de que sirven. Buscan afuera y no adentro. Ilusoriamente esperan una receta milagrosa que los haga sentirse mejor y no caen en la cuenta de que la magia esta dentro de cada uno.
Muy interesante la reflexión del psicólogo Juan Carlos Volnovich: “…el éxito de estos libros se debe a la necesidad de comprensión, afecto y espiritualidad en una sociedad acostumbrada al consumo de bienes materiales: "La gente busca ávidamente espiritualidad, algo con lo cual sentirse comprendida. Tiene que ver con la falta de espacios afectivos. Estos libros no aportan nada nuevo, refuerzan estereotipos, convenciones. Y provocan una mezcla de satisfacción y frustración, por eso se consume uno tras otro".
Se consumen uno tras otro… Luego de haber leído uno, uno necesita el tomo siguiente, y el siguiente porque aún no ha saciado su necesidad.
Pero no hay que ilusionarse. En este mundo contemporáneo acelerado ya no hay lugar para el silencio, para la calma y para la “inactividad” (hablando de inactividad a nivel de las actividades cotidianas para poner en marcha la actividad espiritual) o al menos no en las grandes ciudades y menos aún para la gente trabajadora.

¿Qué podemos esperar entonces para un futuro cercano en materia de bienestar espiritual?

Hay que frenar. Frenar y acallar la mente, hacerse tiempo para las cosas. No todo puede ser trabajo y exigencias. En la medida que uno logra ampliar el campo de comprensión, todo resulta más fácil y ameno. El camino se esclarece. Pero esto es imposible con el ritmo al que venimos funcionando.

Como dice Agnes Heller en su libro: “Políticas de la Pos Modernidad”… “La prisión del presente solo permite huidas ilusorias”. Y los libros de autoayuda parece ser una de ellas.











BIBLIOGRAFÍA:

*Fein, Ellen; Schneider, Sherrie “Las reglas del juego”. Grupo Editorial Planeta, Mayo 1997, Buenos Aires
*Chopra, Deepak “El libro de los secretos”. Editorial Alamah, Marzo 2005, Buenos Aires.
*Chopra, Deepak “Sincro Destino. Editorial Alamah, Diciembre 2003, Buenos Aires.
*Riso, Walter “Amar o depender”. Grupo Editorial Norma, Agosto 2004, Buenos Aires.
*Heller, Agnes y Feher, Ferenc “Políticas de la Pos modernidad”. Editorial Península. 1989, Barcelona.
*Cuaderno Viaje y Escritura I, Cátedra Reale. Secretaría de Publicaciones CeCsO de la Universidad de Buenos Aires.
*Sitio Web Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Pata%C3%B1jali
*Sitio Web de meditación: http://www.hostingaloha.com/meditacion/historia_de_la_meditacion.php
*Sitio Web de la Universidad de Maimónides: http://weblog.maimonides.edu/gerontologia2004/archives/000025.html










1 comentario:

Penélope dijo...

Enhorabuena, quería felicitarte pues me parece increíble tu forma de escribir con tan solo 19 años, estoy segura de que llegarás muy lejos...gracias por permitirme viajar en tus textos, un saludo.